SINOPSIS
¿Es posible una escena que revele esa luz que cada uno guarda en su zona de sombra?
El exceso de iluminación está impidiendo que las pequeñas luces no normativas desaparezcan.
La transparencia a la que nos vemos obligadas y empujadas impide el desarrollo de la intimidad, del erotismo, de la fantasía y de la diferencia. Tan pronto como una diferencia específica parece asomar, la luz cegadora del poder la convierte en producto y la sistematiza. Categorías nuevas aparecen para capitalizarse, y la resistencia se anula, precisamente, cuando ésta necesita darse a conocer a través de los medios que, hoy en día, tenemos a nuestro alcance. El teatro, la danza, la música y demás experiencias artísticas son fuente inagotable de tendencias que se registran y neutralizan, aunque haya reductos donde una aparente libertad nos alivia y nos cura. ¿Cómo generar un ambiente lo suficientemente oscuro como para que brillen las luciérnagas?